miércoles, 22 de abril de 2009

Ranchera

¿Saben de esas rancheras americanas descubiertas por atrás? Pues ellos lo hicieron allí, en el desierto, y se arroparon con mantas y besos a la noche, y con algo de cráteres lunares también, por qué no decirlo. Y cuando se dieron cuenta el amanecer ya estaba anegándolo todo como una riada brava y salvaje, la arena, los cactus, hasta las sienes.
Y entonces, o mucho antes (ya el tiempo dejaba de tener sentido, importancia o baremaciones coherentes), se dieron cuenta de que lo suyo era técnicamente imposible, literalmente inviable, premeditadamente inconcebible. Las piedras se regaban con su sudor y su puta lascivia enferma. Las serpientes rezaban para que les sapicara algo de semen y menos de pecado. El color naranja y el olor ocre, el sonido terroso y el tacto austero de la desolación. Las palabras dicharachero, cerveza fresca y 120 millas por hora. Pero sobre todo la sensación de vacío, de desapego, de "vuelta a empezar".
Que ambos sabían muchísimo antes de tocarse la piel o arrancarse las uñas, que todo aquello se llamaba revolcón taciturno, que todo lo demás era deforestación del deseo.
Que follarse sin entenderse, sin escucharse, era la mayor concesión de libertad que podían otorgarse en aquel árido rincón de sus destinos.
Que la putrefacción entrevenándose en su pene, uno, y en sus muslos, otra; que el mero hecho de levantarse, bajarse de la parte trasera de la camioneta, subirse a la cabina, encender el motor, y ponerse las gafas de sol por miedo a que se los tragara el cielo, les resultara más asqueroso que una huída oficial en toda regla, todo eso ya lo sabían antes de preguntarse los nombres, pero sin embargo les gustó tanto que decidieron olvidárselos, olvidarse, seguir sobreviviendo.

3 comentarios:

  1. Volver a leerte de nuevo si que es duro. Menuda adicción.

    ;)

    ResponderEliminar
  2. ....puta lascivia enferma... revolcón taciturno, deforestación del deseo... Me encanta :)

    ResponderEliminar
  3. Sexo y amor. Sexo sin amor, amar sin sexo. Pobre de ti si alguna vez follas con quien de verdad amas. No tiene marcha atrás, no se puede desaprender, hacer como que no sabes. Y prefieres después ser amable con quien sólo te gusta, por no llorar, y no preguntar demasiado cuando has sudado bien el deseo de tu cuerpo y el deseo de su cuerpo. Y te ha gustado tanto... qué coño tiene que ver con el amor.

    ResponderEliminar

Huellas